Mariana Zaffaroni Islas y Sabrina Gullino Valenzuela Negro, dos nietas, son junto a Analía Argento las autoras de esta publicación destinada especialmente a jóvenes lectores.
«Hay que contar todo otra vez. Todas las veces que sea necesario», aseguró Analía Argento en la presentación de Los nietos te cuentan cómo fue (Marea Editorial). El libro hila 13 historias de nietes apropiades durante la última dictadura que pudieron recuperar sus identidades. Mariana Zaffaroni Islas y Sabrina Gullino Valenzuela Negro, dos nietas, son junto a Argento las autoras de esta publicación destinada especialmente a jóvenes lectores. «Hay que seguir contando esto a las nuevas generaciones, que ya lo ven en los libros de historia, pero este es un enfoque desde lo emotivo», definió, por su parte, Zaffaroni Islas.
La charla en la Casa por la Identidad, ubicada en el Espacio Memoria y Derechos Humanos (exEsma) y perteneciente a Abuelas de Plaza de Mayo, ocurrió en medio de un clima especial. En vísperas de otro 24 de marzo, uno muy particular, porque la reivindicación del horror de la dictadura ha vuelto a circular. Con las rejas del predio cubiertas de banderas con reclamos para la reincorporación de los despedidos de la Secretaría de Derechos Humanos y denuncias de vaciamiento. Ocurrió, además, poco después del ataque a la militante de HIJOS y del atentado digital sufrido por Marea Editorial, temas que obviamente fueron mencionados en el encuentro.
El perfil de Facebook del sello especializado en periodismo y derechos humanos recibió desde el domingo a la madrugada más de 800 mensajes y comentarios de odio, en defensa de la última dictadura militar y contra las Abuelas. «Esto es generalizado. No somos los primeros ni los únicos«, dijo Constanza Brunet, directora de Marea. «Falta mucho. Tenemos mucho que contar. Mucho por qué luchar. La parte positiva fue la gran reacción que hubo frente a esto, de autoras, autores, periodistas, escritores, lectores. Fue una excusa para hablar de esto que está pasando, que no es normal. La idea es visibilizar, no naturalizar. Somos muchos los que estamos completamente en contra», agregó Brunet, quien espera que este domingo la movilización en conmemoración a los desaparecidos sea «más masiva».
Presentó la charla Juan Pablo Moyano, nieto recuperado e integrante del equipo de la Casa. Estaba presente Luisa Valenzuela. Argento y Zaffaroni Islas contaron cómo se gestó el proyecto. Los nietos te cuentan cómo fue. Historias de identidad está escrito por ellas, en tanto que Gullino Valenzuela Negro -quien no pudo estar el viernes- se ocupó de las ilustraciones. Argento es sobrina de un desaparecido, Beto, hermano de su madre. «Cuando se retomaron los juicios, en 2003, y en el Congreso se derogaron las leyes de Obediencia Debida y Punto Final, me di cuenta de que tenía algo pendiente, que tenía mucho que ver con la nena que fui. Lo único que había hecho era rezar, de chiquita», recordó la periodista. En 2006, motivada por esta idea, publicó el libro De vuelta a casa, con historias sobre nietes apropiados y sus restituciones.
Con Zaffaroni Islas se conocieron en Uruguay, cuando la periodista viajó a presentar ese material. «Recuperé la identidad en el año ’92, cuando tenía 17 años -evocó Mariana-. Como buena adolescente me enojé, pero no contra la autoridad y los mandatos, sino con mi historia. No quería saber nada con esa noticia que me había llegado de que no era hija de quiénes pensaba, de que tenía otro nombre y origen. Durante mucho tiempo tuve eso en el freezer. Después fui aflojando esa rigidez, cuando entré en contacto con mi familia biológica. Tengo con ella un vínculo hermoso, pero me costó muchísimo. Mis papás eran uruguayos. Vinieron a la Argentina escapando de la dictadura uruguaya, que comenzó antes, pensando que este era un lugar de paz y democracia.» Casualidad o no, Mariana cumplía años el mismo día de la presentación del libro, lo que sumó una cuota de emotividad al evento, al igual que una anécdota sobre una foto suya de cuando era bebé.
Acudió a la presentación de De vuelta a casa en una de sus visitas a la familia biológica y por un comentario que le hizo Macarena Gelman. El libro le encantó. «Después de un tiempo nos encontramos en un café, (Argento) agregó un capítulo sobre Uruguay, me lo llevé, lo leí de corridito, lo terminé y le dije que habría que escribir las historias de todos los nietos. Todos tienen una historia común, lo que nos pasó como sociedad, pero cada historia tiene algo memorable y único«, expresó Zaffaroni Islas.
De este deseo de una nieta de que otras historias de nietes sean narradas surgió el libro presentado. La editorial propuso que fuera para adolescentes, por eso contiene ilustraciones. Sabrina dibujando, esa es la tapa: ella busca a su hermano mellizo, y suele dibujar para imaginar cómo será él. Las autoras comentaron que intentaron reflejar 40 años de la búsqueda de Abuelas y que incluyeron tres casos por década. Fueron en busca de historias poco conocidas o «paradigmáticas» por alguna razón. Quisieron «mostrar distintas etapas en la recuperación de la identidad» ya que «recuperarla siendo niño, adolescente, joven o adulto presenta diferentes desafíos», explicó Mariana. «Tratamos de contar todas las posibles aristas que representa apropiarse de la identidad«, sumó. Argento analizó: «Elegimos casos en los que fraguaron el ADN o escaparon. Más tarde o más temprano todos terminan contando la misma historia: quizás la noticia inicial es fuerte y dura, pero después todos dicen que es liberador. Que saber la verdad es lo mejor que les podía pasar».
El libro fue editado en diciembre. El proceso de producción se realizó en 2023. «Nos parecía sumamente interesante hacerlo en un año en que había elecciones, se cumplían 40 años de democracia y empezaba a verse lo que traían Milei y la gente que lo sigue, y teniendo en cuenta que la mayoría de la gente que está con Milei son jóvenes», dijo Zaffaroni Islas. «Cuando decimos ‘nunca más’ es ‘nunca más'», concluyó Argento. La noche caía sobre la exEsma, y algunas lágrimas, en los rostros de los asistentes.
Fuente: Pagina12