Ricardo Rojo nació en Urdinarrain, Entre Ríos, en 1923. Fue abogado, escritor y político. Se inició en la dirigencia estudiantil, donde se sumó a la Federación Universitaria de Buenos Aires (FUBA) y a la Unión Cívica Radical. A los 29 años integró una comisión para defender a presos políticos y sindicales, cuyo jefe era Arturo Frondizi. En 1953 fue acusado de haber participado en la colocación de explosivos durante un discurso de Perón. En mayo logró fugarse de la cárcel, se asiló en la embajada de Guatemala, se exilió en Chile y de allí pasó a Bolivia, donde conoció al joven Ernesto Guevara. Tras la caída de Perón, en 1955, regresó a la Argentina y fue colaborador directo de Frondizi. En 1959 fue nombrado consejero político en la embajada argentina en Bonn, Alemania. En 1961 viajó a La Habana y compartió con el Che numerosos eventos y acciones de la Cuba revolucionaria. De regreso a la Argentina, el golpe de Estado de 1962 y su identificación con el frondizismo lo llevó nuevamente a prisión durante un largo período. Rojo fue un hombre conciliador, entre la democracia y la revolución. Falleció en 1996, a los 72 años.
Ver biografía completa